A pesar de que chillamos, aplaudimos y nos emocionamos como nadie, no pudo ser. Y no será porque no le pusimos ganas eh, porque si en la semifinal contra el Barcelona, nos volvimos locos buscando una sustituta para "Ni Bullock ni Smith, Koljevic". Ayer en la final, nuestra rabia, energía y ansia de victoria la pagamos con los aplaudidores de Orange, que si no rompimos 10 o 12 no rompimos ninguno.
Que a pesar de que no distingamos a Salgado de Marcelinho, o que Marcelinho sale con la camiseta de calentar, y pensemos que es Paco Vazquez, en ruido y en ilusión no nos ganó nadie.
Pero bueno, era previsible que el Bilbao Basket no podría con el Baskonia, que a pesar de la baja de Scola, este año siguen teniendo un buen bloque, porque no está Scola pero juega Splitter, y no está Erdogan pero juega Jasaitis, así que a pesar de las bajas siguen siendo competitivos. Mientras nosotros fichamos a Paco Vazquez, y a Quincy Lewis para lanzar desde el perímetro, y no preparamos ninguna jugada para ellos, y son todo tiros a lo loco, que resumen perfectamente lo que fue el partido del Bilbao Basket, ilusión y esfuerzo, pero sin saber muy bien que hacer con cada balón, no había juego en equipo, o el mister no transmitía bien las órdenes o la tensión cegaba a los jugadores. A pesar de todo, les seguiremos animando, porque son nuestros jugadores, y Lewis, es nuestro "negro".
1 comentario:
triple del negro!!!
uiiii, casiii
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