Y fíjate que no tenía especial predilección por un equipo o por otro, pero vista la marea Azul que se había levantado estos días, me alegro que ganaría el Valencia. A parte de esto, en la segunda parte el Getafe no dio síntomas en ningún momento de poder ganar la final, y si algo ha echo grande al Getafe en este tiempo, ha sido su buen trato del balón, ayer nada de nada. Así, en la segunda parte, con la obligación de remontar el 2-1 de la ida, sólo creo dos ocasiones de gol, la primera jugada fue una genialidad de Granero que se fue al larguero y la segunda un remate de Braulio que desvía el portero del Valencia a corner con una espectacular estirada, pero es que antes, el Valencia había tenido dos clarísimas también en las botas de Villa, la primera falló un mano a mano bastante claro con Ustari y la segunda tras una buena jugada en el área su disparo se encontró con las manos de Ustari.
Así transcurría el tiempo, y se lesionó Villa, y Koeman contra todo pronóstico puso a Morientes, cambio más que criticados por los expertos del fútbol, ya que, Morientes es un jugador de área y necesitaba balones colgadas, y Silva y Arizmendi estaban muy mermados físicamente como para poder poner esos balones, ellos hubiesen apostado mejor por Joaquín, pero Koeman no lo vio así y se llevo palos, luego Morientes con su olfato de gol sentenciaría el partido, pero ya era demasiado tarde, Koeman ya estaba sentenciado, es mal entrenador.
Ahora es cuando recordamos a Capello, y lo bueno que era este tío metiendo cambios ilógicos pero que le resolvían los partidos, exactamente igual que Koeman ayer, pero uno es bueno y otro malo.
Y del Getafe que decir, ¿decepción? pues si, porque no jugó a nada, pero un equipo de las características del Getafe y llegar dos años consecutivos a la final de Copa, es para estar bien orgullosos del equipo.
Así transcurría el tiempo, y se lesionó Villa, y Koeman contra todo pronóstico puso a Morientes, cambio más que criticados por los expertos del fútbol, ya que, Morientes es un jugador de área y necesitaba balones colgadas, y Silva y Arizmendi estaban muy mermados físicamente como para poder poner esos balones, ellos hubiesen apostado mejor por Joaquín, pero Koeman no lo vio así y se llevo palos, luego Morientes con su olfato de gol sentenciaría el partido, pero ya era demasiado tarde, Koeman ya estaba sentenciado, es mal entrenador.
Ahora es cuando recordamos a Capello, y lo bueno que era este tío metiendo cambios ilógicos pero que le resolvían los partidos, exactamente igual que Koeman ayer, pero uno es bueno y otro malo.
Y del Getafe que decir, ¿decepción? pues si, porque no jugó a nada, pero un equipo de las características del Getafe y llegar dos años consecutivos a la final de Copa, es para estar bien orgullosos del equipo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario