Ya se sabe que cuando las cosas van mal, los nervios afloran. En el Deportivo de la Coruña, eso ha ocurrido, con el equipo en puestos de descenso y con sólo 17 puntos de los 54 jugados. Los ánimos se han caldeado y han aparecido las tortas, pero lo raro de esta ocasión es que los hechos no se han producido durante el desarrollo del entrenamiento, sino después del mismo, cuando se supone que la tensión del entrenamiento ha disminuido.
Los involucrados en esta pelea han sido los dos porteros del Deportivo, Munúa y Auoate. Aunque bueno, no ha sido una pelea como tal, sino que según cuenta Auoate, Munúa le dijo haber que le miraba así, y sin mediar palabra le propinó un puñetazo en la cara, que le ha supuesto que le tengan que dar ocho puntos de sutura.
Todo parece indicar que la agresión tiene su origen, en el cambio de la confianza del entrenador en un portero, pero en esta ocasión también es diferente, ya que, el agredido es el portero que ha pasado de la titularidad a la suplencia, y el agresor el suplente que se ha convertido en titular, en fin cosas de este mundo.
Así que se cree, que el desencadenante de la agresión han sido las palabras de Auoate, en las que decía que no era justo el cambio de decisión del entrenador, pero en ningún momento arremetió contra Munúa.
Ya se sabe, cuando algo va mal, siempre puede ir peor, pero lo más triste de todo, es creer que la única solución a los problemas en la violencia..... Es muy triste, pero parece que vivimos en ese mundo en el que todos piensan que la violencia es la única solución, cosa que nos hace parecer más a los animales salvajes que a personas humanas, como queremos hacernos creer que somos.
Los involucrados en esta pelea han sido los dos porteros del Deportivo, Munúa y Auoate. Aunque bueno, no ha sido una pelea como tal, sino que según cuenta Auoate, Munúa le dijo haber que le miraba así, y sin mediar palabra le propinó un puñetazo en la cara, que le ha supuesto que le tengan que dar ocho puntos de sutura.
Todo parece indicar que la agresión tiene su origen, en el cambio de la confianza del entrenador en un portero, pero en esta ocasión también es diferente, ya que, el agredido es el portero que ha pasado de la titularidad a la suplencia, y el agresor el suplente que se ha convertido en titular, en fin cosas de este mundo.
Así que se cree, que el desencadenante de la agresión han sido las palabras de Auoate, en las que decía que no era justo el cambio de decisión del entrenador, pero en ningún momento arremetió contra Munúa.
Ya se sabe, cuando algo va mal, siempre puede ir peor, pero lo más triste de todo, es creer que la única solución a los problemas en la violencia..... Es muy triste, pero parece que vivimos en ese mundo en el que todos piensan que la violencia es la única solución, cosa que nos hace parecer más a los animales salvajes que a personas humanas, como queremos hacernos creer que somos.
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